La zanahoria es una de las verduras más elegidas para la cocina argentina, ya que se puede usar tanto en ensaladas, guisos, sopas o hasta en purés. Sin embargo, pocas personas saben cuál es la forma ideal para cocinarla y que no pierda sus nutrientes.
Si bien es muy común saltearla o hervirla, estas técnicas puede reducir parte de sus propiedades beneficiosas, por lo que no son muy recomendables. Por eso, existe una forma ideal: la cocción al vapor.
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Por qué la cocción al vapor es la ideal
La cocción al vapor ayuda a conservar al máximo las propiedades de la zanahoria, ya que no entra en o directo con el agua y evita la pérdida de nutrientes. Además, la temperatura del vapor es suficiente para ablandar su textura y potenciar su sabor natural, sin la necesidad de agregar grasas.
Cómo cocinar las zanahorias al vapor
- Cortá las zanahorias en rodajas o bastones para que el vapor penetre de manera uniforme y rápida.
- Colocalas en un colador con sobre una olla con agua hirviendo.
- Tapalo y cocinalo durante 5 a 7 minutos, hasta que estén tiernas, pero firmes, para evitar que pierdan textura y sabor.
- Si querés potenciar aún más su sabor, podés agregar hierbas frescas o un toque de jugo de limón después de la cocción.
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Las ventajas de la zanahoria al vapor
Cocinar la zanahoria al vapor es una técnica simple, pero muy beneficiosa, que permite aprovechar al máximo las propiedades nutritivas de esta verdura. Las principales ventajas:
- Preserva los nutrientes: al no estar en o directo con el agua, la zanahoria retiene mejor sus vitaminas, minerales y antioxidantes, especialmente el betacaroteno, clave para la salud ocular y la piel.
- Mejora la absorción del betacaroteno: la cocción al vapor ayuda a liberar el betacaroteno y facilita que el cuerpo lo transforme en vitamina A, fundamental para el sistema inmunológico y la visión.
- Mantiene la textura y sabor natural: la zanahoria al vapor conserva su textura tierna, pero firme y su sabor dulce característico, sin necesidad de agregar grasas o condimentos que puedan alterar su perfil saludable.
- Es una opción ligera y baja en calorías: al no requerir aceite ni manteca para su cocción, es ideal para quienes buscan cuidar la alimentación y reducir la ingesta calórica sin sacrificar sabor ni nutrientes.
- Facilita la digestión: la cocción al vapor ablanda la fibra de la zanahoria, lo que facilita su digestión y mejora la absorción de nutrientes sin perder sus beneficios.