Bajo el lema de “establecimiento de justicia histórica”, un grupo de excavadores rusos encontró un verdadero agujero del infierno en la ciudad de Salks, región de Rostov. Allí, el grupo de investigadores encontró más de 3500 restos de cuerpos de mujeres, niños e incluso bebés que fueron masacrados durante la Segunda Guerra Mundial.
Las imágenes del lugar llamado “la cantera de la muerte nazi” son realmente aterradoras. La evidencia que lograron obtener los excavadores sugiere que muchos de los cuerpos encontrados fueron apuñalados con bayonetas, pateados en la cabeza e incluso golpeados hasta la muerte.
Según los primeros informes, algunos de los cuerpos encontrados son de los prisioneros de guerra del Ejército Rojo que luchó en plena Segunda Guerra Mundial. Además, se cree que entre los muertos se encuentran principalmente rusos, judíos y gitanos relacionados con la Operación Barbosa, lanzada por los nazis en 1941.
Hasta el momento se han realizado análisis de ADN de 60 conjuntos de restos humanos. Los resultados preliminares arrojaron que hay 16 mujeres y 19 niños. La esperanza es hacer coincidir algunas víctimas por ADN con sus parientes.
Los descubrimientos fueron posibles luego de la desclasificación de documentos de los archivos del servicio secreto de la KGB de la era soviética. Actualmente se están llevando a cabo varias excavaciones en todo el país.
Por su parte, esta operación busca descubrir un hallazgo legal para los crímenes nazis “sin un plazo de prescripción” y fue realizada por el equipo de búsqueda voluntario Mius-Front, dirigido por Andrey Kudryakov, que desde ahora trabajará en estrecha colaboración con el Comité de Investigación de Rusia, encargado de investigar delitos graves.
Los aterradores descubrimientos
Dentro de las imágenes que se pudieron compartir, las reacciones de los investigadores son realmente conmovedoras. Andrey Kudryakov relató, en ruso, lo que encontraron en esta especie de búnker nazi y aclaró: “No nos hemos encontrado nunca con algo igual”.
Según la explicación del líder de la expedición, las personas no fueron baleadas sino asesinadas a golpes. “Se necesita mucha munición para disparar a cientos de personas, así que guardaron sus balas y las golpearon con culatas de rifle, patearon con botas y apuñalaron con bayonetas”, expresó Kudryakov.
En las imágenes Kudryakov muestra la bota de un niño junto a una clavícula muy pequeña. Pero eso puede ser considerado leve, al lado de otras imágenes. Uno de los excavadores mostró un cráneo roto junto a quien probablemente sea su madre”.
“Vimos los restos de un niño junto con su mamá en este terrible pozo de ejecución“, mencionó otro de los integrantes del grupo Mius-Front en una conferencia de prensa. El propio Kudryakov reconoció que la zona no fue bien investigada anteriormente y que ahora “está revelando terribles secretos”.
Otro de los hallazgos más aterradores que es el cuerpo de una joven embarazada con una cruz cosaca alrededor del cuello. “Ella se llevó las manos a la cabeza con horror para no ver cómo la estaban matando”, relató el líder del grupo de investigadores.
“Hoy fueron encontrados 15 niños de entre uno a diez años. Eso da miedo”, expresaron los investigadores del Mius-Front, quienes ratificaron que la expedición continuará trabajando en “la cantera de la muerte” de la ciudad de Salsk.
