La familia de Federico Garmendia, el joven entrerriano que murió tras caer de un tercer piso en Ibiza, vive un momento de mucho dolor. En estas horas, la policía lleva a cabo la autopsia y otras pericias y la hermana melliza del fallecido, María Garmendia, está viajando a España para ocuparse de todos los trámites.
La hipótesis que manejan los parientes del DJ hasta ahora es que se trató de un accidente: “Parece que se descompensó y estaba al lado de la ventana de su habitación”, contó su hermano mayor, Joaquín Garmendia, a TN.
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“Hubo rumores de que se suicidó, pero la persiana estaba mal cerrada y, según dice la policía, la forma en la que estaba abollada parecía un golpe accidental. Si él hubiera hecho eso, se notaría una mínima planeación. La persiana estaba cerrada y hasta era insegura”, explicó.
Además, Joaquín Garmendia señaló que también se descarta la hipótesis de un crimen porque los investigadores “no encontraron nada raro en su habitación, no había señales de robo”.
“Por supuesto, son todas elucubraciones con base en hipótesis”, remarcó el hermano de la víctima y aclaró que la familia deberá esperar a que María Garmendia llegue a Ibiza para recibir más información.
Por otro lado, lo que sí pudieron conocer en la investigación preliminar es que Federico Garmendia estaba solo. “No había nadie ahí. Lo raro es por qué se pudo haber caído y qué le pasó para que se descompense y caiga”, señaló el hermano. Según contó, el joven de 38 años era “bastante saludable, hacía pesas” y se ejercitaba con frecuencia.
El incidente ocurrió el lunes en la mañana. Según precisaron los medios locales, la Policía llegó a la intersección de Navarra y calle del País Vasco poco después de las 8:30. De momento, la familia sabe que él estaba solo en el departamento. “Lo encontró una chica que iba paseando a los perros”, detalló Joaquín, pero no conoce más detalles.
Enseguida llegó el personal médico y comenzó a realizarle maniobras de reanimación cardiopulmonar durante 15 minutos. Pese a los esfuerzos, no lograron salvarlo.
Ahora, la familia hará los trámites para repatriar su cuerpo y espera que se esclarezcan las causas del hecho.
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Por su parte, Joaquín pidió aclarar que la recaudación de fondos que circuló por redes sociales no estaba previsto que se difundiera por fuera del círculo de “familiares y amigos”. Destacó que el anuncio, por la buena intención de la comunidad, se viralizó. “Pareciera que era para el público, pero no era el caso”.
Además, lamentó que si bien hubo desconocidos que republicaron por solidaridad, recibió muchos “comentarios maliciosos”. “Imaginate que te digan que se te muere un familiar y tenés que pagar $20 millones. Sus amigos hicieron una vaquita y entre nosotros juntamos. Nos deshicimos de todo lo que teníamos para poder pagar. Con esfuerzo, nos podemos hacer cargo”, señaló.
“Era superquerido”
Federico Garmendia se mudó a Ibiza en 2010. Si bien le “gustaba pasar música” en fiestas, “no era DJ profesional”, destacó su hermano mayor. Su último trabajo fue la istración de edificios y también trabajaba como seguridad en boliches ocasionalmente.
“Él decía que estaba juntando para venirse a invertir en Argentina, pero él amaba Ibiza, le encantaba. Era superquerido, todo el mundo lo amaba, era una excelente persona”, dijo Joaquín, quien a pesar de haber tenido diferencias típicas de hermanos, logró recomponer la relación antes de la tragedia.
“Nos había comprado las entradas a mi papá, a mí, para ir a ver a Boca en La Bombonera y el lunes me avisan que se murió. Él era medio loco, terco y atolondrado, habíamos tenido una diferencia, pero en los últimos meses nos hicimos saber que nos queríamos y es un poquito de alivio. Lamentablemente, no pudimos darnos ese abrazo de reconciliación”, concluyó.
