La dueña de un bar de la localidad mendocina de Malargüe fue detenida en las últimas horas acusada de anestesiar a sus empleadas, inyectarles siliconas y explotarlas sexualmente en su local bajo amenaza.
Según la información difundida por el Ministerio Público Fiscal de esa provincia, la mujer fue trasladada a la penitenciaría y la fiscal a cargo de la investigación, Andrea Lorente, abrió una causa por los delitos de “privación ilegítima de la libertad agravada por la violencia, lesiones leves y amenazas coactivas agravadas por el uso de arma de fuego”.
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Además, a esos cargos se le suman otros encuadres penales que también son investigados como “el ejercicio ilegal de la medicina, lesiones graves dolosas, amenazas agravadas por el uso de arma y facilitación de la prostitución con ánimo de lucro”.
La investigación
De acuerdo al expediente, la imputada llevaba a su casa a las chicas que trabajaban en el bar nocturno ubicado en San Martín Sur y Anglat, del cual ella era propietaria, y una vez allí las sedaba, les colocaba siliconas en los pechos y las amenazaba.
Fue una de las víctimas la que, tras sufrir serias consecuencias en su salud, se decidió a hacer la denuncia y su testimonio fue el disparador para que otras tantas mujeres también se animaran a denunciar la misma situación.
Una vez que la fiscalía tomó o con la causa, la dueña del boliche fue imputada y trasladada al penal, dado que ya pesaba sobre ella una condena de ejecución condicional.
Día Internacional contra la explotación sexual y el tráfico de mujeres, niños y niñas
Un 23 de septiembre de 1913 se sancionó en la Argentina la primera norma legal en el mundo destinada a luchar contra la el abuso y la trata de menores para explotación sexual. Desde ese entonces, debido a esta iniciativa considerada un hito argentino a nivel mundial, dicha fecha es empleada para visibilizar y concientizar sobre estos actos que atentan contra la dignidad y los derechos humanos más elementales.
La Ley 9143, conocida como la “Ley Palacios” fue redactada e impulsada por el entonces diputado socialista Alfredo Palacios para dar batalla a este delito que constituye el tercer negocio ilegal más lucrativo del mundo, solo detrás del tráfico de armas y de drogas.
