Asesinaron de un balazo en la cara a un hombre de 76 años en Villa Soldati y todo quedó registrado por las cámaras de seguridad de la zona. La Policía sospecha que se trató de un crimen por encargo o un ajuste de cuentas.
Poco después de las 05:00 de este jueves, en las calles Tabaré y Pizarro, un vecino alertó a la Policía sobre un sujeto que se encontraba tirado en la vereda y con un disparo en el rostro.
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Personal del SAME se dirigió al lugar, pero solo pudieron corroborar que el hombre ya estaba muerto. Rápidamente, dieron aviso a una brigada especializada y a peritos técnicos que llegaron hasta allí para realizar tareas de investigación.
El hombre fue identificado como Adolfo Gustavo Calabreta, de 76 años, quien, según los testimonios de los vecinos, alquilaba hace aproximadamente un año una vivienda en Tabaré 2748, cerca de donde fue encontrado sin vida.
La Policía analizó las imágenes de una cámara del Centro de Monitoreo Urbano y encontró una grabación en donde se observa a un hombre de cabello negro, vestido con una campera azul similar a la de la Selección Argentina de fútbol, jeans y zapatillas oscuras.
El sujeto se acercó a la víctima e intentó quitarle algo. Tras forcejear, le disparó en la cara y escapó rápidamente.
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Con esta descripción, distintos móviles policiales iniciaron una recorrida por la zona buscando al sospechoso, pero aún lograron encontrarlo.
La principales hipótesis que manejan los investigadores radican en que se trató de un homicidio por encargo o un ajuste de cuentas, ya que por el momento descartaron que se trate de un robo.
Además, de acuerdo a las primeras averiguaciones, los investigadores no constataron hechos delictivos previos en el lugar y tienen como único testimonio al hombre que halló el cuerpo, quien esperan que pueda aportar pruebas claves para esclarecer el caso.
“Se conocía a todo el mundo, era muy servicial”, dijo una vecina del barrio a los medios. La mujer contó que escuchó un ruido e intentó arse con el hombre pero no pudo hacerlo: “Le dije a mi hija, ‘no me atiende, tengo miedo porque es raro’, y después nos enteramos que lo habían matado”, lamentó.
Además, añadió que tenían una buena relación y que no sospecha de que se trate de un robo porque “no se llevaron nada”.
“Era muy querido en el barrio y muy servicial, si se te rompía algo te lo arreglaba”, expresó.
