En medio de la interna que atraviesa el peronismo, el gobernador bonaerense Axel Kicillof defendió a la exvicepresidenta Cristina Kirchner luego de que Estados Unidos anunciara este viernes la prohibición para entrar a su territorio, al igual que a sus hijos Máximo y Florencia.
“Triste y grave: Estados Unidos le niega la entrada Cristina Kirchner, De Vido y sus familias. La costumbre norteamericana de atacar al peronismo por defender el interés nacional de la Argentina”, cuestionó el mandatario provincial en sus redes sociales. Y remarcó: “Esta medida insólita y ofensiva para nuestra soberanía fue claramente tomada en complicidad con Javier Milei, un presidente que se arrastra frente a Washington con la misma pasión con la que desprecia a la Argentina. La patria no se vende”.
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A Cristina Kirchner y De Vido se los acusa de “abusar de su posición para orquestar y beneficiarse económicamente de múltiples esquemas de sobornos relacionados con contratos de obras públicas, lo que resultó en el desfalco de millones de dólares del gobierno argentino”, detalló el Departamento de Estado norteamericano en un comunicado.
Luego, el presidente Milei ironizó sobre la prohibición con un mensaje en su cuenta de X. “Che, Cristina”, publicó el jefe de Estado.
Pese a la fuerte denuncia, no hay mención específica a ninguna de las causas en donde la expresidenta o su entorno son investigados por la Justicia argentina. Es la primera vez que el gobierno de los Estados Unidos se expide de esta manera sobre la istración kirchnerista.
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“Múltiples tribunales han condenado a Cristina Kirchner y Julio De Vido por corrupción, socavando la confianza del pueblo argentino y de los inversores en el futuro del país”, señala el documento emitido por la istración de Donald Trump.
El gesto de Kicillof cobra relevancia en medio de la fuerte disputa que mantiene con la exvicepresidenta. El Gobernador comenzó a dar indicios de buscar cierta autonomía política, incluso lanzó su propio espacio semanas atrás, Movimiento Derecho al Futuro.
La relación se tensó hace tiempo y empeoró cuando fue la interna del PJ, donde CFK se postuló de manera sorpresiva, luego de que el gobernador riojano Ricardo Quintela se presentara primero. El mandatario había recibido el apoyo de Kicillof y este no cambió su respaldo luego de conocer la candidatura de la expresidenta.
Las aspiraciones electorales de Kicillof chocan también con La Cámpora que sostiene que el liderazgo es de Cristina Kirchner. El malestar interno es tal que hay roces en la Legislatura bonaerense.
