La Unidad de Información Financiera (UIF) ordenó congelar los activos de Hezbollah, al considerarla una "organización terrorista" y extendió esta medida a "todas las entidades del ala militar que integra la misma y sus líderes".
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La medida se produce un día después de que el Gobierno creara el Registro Público de Personas y Entidades Vinculadas a Actos de Terrorismo y su Financiamiento (RePET). La organización fundamentalista Hezbollah es investigada por su accionar en los atentados a la embajada de Israel y la AMIA, que dejaron un total de 114 muertos.
En un comunicado, el organismo destaca que Hezbollah y su ala militar ya fue catalogada como organización terrorista por varios países, entre estos Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Australia, Nueva Zelanda, Israel y Holanda.
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"Dichas designaciones dejan en claro que Hezbollah ha sido responsable de la comisión de numerosos actos terroristas alrededor del mundo, entre ellos el de la AMIA y el acaecido contra la Embajada de Israel de Buenos Aires en 1992, que tuvo un saldo de 29 muertos y 242 heridos", agregó el comunicado.
A su vez, para la UIF, el grupo libanés aún representa una "amenaza actual y vigente" para la seguridad nacional y la integridad del orden económico financiero del país.
Con esta medida, se espera asfixiar las finanzas del organismo en la Argentina y dar un nuevo golpe a sus células, que operan en la Triple Frontera.
