Natalia Oreiro aprendió que ninguna noticia falsa sobre ella puede afectarla tanto como le ocurrió a sus 18 años, cuando una pareja le aseguró muy convencida que ella era una bebita que habían robado durante la dictadura militar y por ello le exigió un examen de ADN para reclamarla como propia.
Después de convertirse en Paquita de Xuxa a los 15 años, la actriz y cantante nacida en Montevideo el 19 de mayo de 1977 se mudó a Buenos Aires. Mientras se encontraba en la ciudad capital de la Argentina grabando la novela 90-60-90 Modelos, que la convirtió para siempre en una estrella, recibió la visita de un hombre desconocido.
Según lo contó tiempo después, Natalia Marisa Oreiro Iglesias -su nombre completo- estaba almorzando como casi siempre en el bar El Timón, que estaba en el barrio porteño de Palermo, frente a Canal 9, que emitía la novela que tenía como protagonistas a Raúl Taibo y Silvia Kutika, entre otros.
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Fue entonces cuando un hombre le pidió permiso para sentarse con ella y, como lo creyó un fan, le dijo que sí. Sin embargo, el desconocido le aseguró: “Soy tu verdadero papá”. Y le contó que su esposa la había reconocido en el programa como la bebita que les había sido arrebatada durante la dictadura militar.
La primera actitud de la actriz, conmovida, fue mostrarle una foto de su madre, Mabel Iglesias Bourie, a quien se parece mucho. La modelo y bailarina se crió en Montevideo y durante dos años también en Madrid con su familia, que se completa con su padre Carlos Oreiro Poggio y su hermana mayor, Adriana.
El reclamo por la identidad que debió afrontar Natalia Oreiro
Cuando este hombre le mostró la foto de su esposa, sintió que también se parecía un poco a ella. Además, le presentó documentos, entre ellos su supuesta partida de nacimiento.
Por todo esto, Natalia Oreiro accedió a hacerse un estudio de ADN, entendiendo cuánto habrían sufrido él y su esposa y para darles a ambos la tranquilidad de que ella no era su hija. Sin que se enteraran sus padres, se hizo el ADN, que dio negativo.
“Lo que sentí en ese momento fue que tenía que ayudar a esa pareja que estaba sufriendo. Sabía lo que había pasado en la dictadura, pero también estaba muy segura de quiénes eran mis verdaderos padres”, le contó a Catalina Dlugi en La Once Diez.
Denuncia en televisión
Sin embargo, el matrimonio pensó que el resultado había sido fraguado y llevó su historia al programa de Chiche Gelblung en Canal 9. Cuando sus padres se enteraron, porque estaban viendo en la tele a “los supuestos verdaderos padres de Natalia Oreiro”, la entendieron. E incluso la acompañaron en su decisión de hacerse un nuevo estudio, para que la pareja se quedara tranquila acerca de su identidad.
Los estudios -de los que también participaron sus padres biológicos- corroboraron que la actriz es hija de quienes siempre consideró y supo sus progenitores, y que no tenía parentesco con el matrimonio que la reclamaba como suya.
Aún así, la pareja recorrió distintos programas de televisión asegurando que la protagonista de la novela de Canal 9 era su bebita robada en la dictadura, durante bastante tiempo.
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“Los estudios dieron negativo con ellos y positivo con mis padres, pero no se quedaron conformes jamás. Reconozco y acepto lo triste que debe haber sido para esa pareja entender que yo no era su hija sustraída”, lamentó Natalia Oreiro.
La artista uruguaya mantiene su vida activa en la Argentina: casada desde 2001 con el guitarrista Ricardo Mollo (líder de Divididos), es madre de Merlín Atahualpa, quien nació en 2012. Además de su gran carrera en la televisión, el cine y la música, creó Las Oreiro con su hermana Adriana y es Embajadora de buena voluntad de Unicef para el Río de la Plata.
