Hay personas que, sin buscarlo, siempre se vinculan amorosamente con gente mayor que ellos. Muchas veces es un patrón que se repite y, para la psicología, tiene un significado más profundo.
Los expertos aseguran que uno de los motivos más frecuentes de esta elección es la necesidad constante de sentirse protegidos, tener una guía o estabilidad. En muchos casos, encuentran en alguien más grande la figura que transmite seguridad emocional.
Según la teoría del apego, quienes tuvieron figuras parentales ausentes, impredecibles o poco afectivas durante la infancia, tienden a buscar parejas que arreglen esa falta, aunque no lo hagan de forma consciente.
Por otro lado, para algunas personas, la diferencia de edad tiene que ver con un grado de experiencia, solidez o sabiduría que les resulta atractivo. Desde la psicología evolutiva, esto puede responder a una valoración positiva de la estabilidad frente a la incertidumbre que muchas veces representan las parejas de la misma edad.
Por último, hay quienes se pueden sentir más cómodos al ser más chicos que su pareja, ya que delegan las decisiones o le ceden el espacio emocional al otro, por lo que puede estar asociado a una baja autoestima.
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¿Qué hay detrás de la atracción por personas mayores?
La atracción por personas de mayor edad no es algo extraño ni necesariamente problemático, pero cuando se repite de forma sistemática, puede estar reflejando necesidades emocionales más profundas. Desde la ciencia, se analizan varios factores que podrían influir en esta elección.
Uno de los más comunes es la búsqueda de seguridad y contención. Las personas mayores suelen transmitir una imagen de estabilidad emocional, experiencia y control, aspectos que pueden resultar muy atractivos para quienes crecieron en entornos inseguros o caóticos.
También puede haber un componente de idealización, ya que asociar la edad con madurez, sabiduría o éxito. Esto puede generar una atracción hacia figuras que se perciben como más resolutivas o capaces, lo que aporta una sensación de respaldo o guía.
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¿Es lo mismo en hombres y mujeres?
Esta elección puede darse en cualquier género, aunque las motivaciones y el modo en que se manifiesta pueden variar según el contexto social o emocional.
Desde la ciencia, por lo tanto, se observa que en las mujeres esta elección a veces se relaciona con la búsqueda de estabilidad, contención emocional o figuras más decididas. En los hombres, por su parte, enamorarse de mujeres mayores puede estar relacionado con el deseo de ser cuidado, iración por la autonomía, o con necesidades no resueltas del vínculo materno.
