A más de un año del mayor hackeo en la historia de Twitter, los investigadores atraparon a un hombre que supuestamente participó en aquella vulneración informática de gran alcance. Por petición de Estados Unidos, la Policía Nacional de España arrestó al ciudadano británico Joseph O’Connor, que además de su eventual colaboración en el ataque a la red social de microblogging también fue acusado de acoso cibernético y de secuestrar cuentas de Snapchat y TikTok.
O’Connor, de 22 años de edad, enfrenta un total de diez cargos, incluidos seis relacionados con el no autorizado a computadoras, dos por acoso cibernético, y el restante por extorsión y amenazas.
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“O’Connor está acusado por una denuncia penal presentada en el Tribunal de Distrito de EE. UU. para el Distrito Norte de California”, señaló en un comunicado el Departamento de Justicia de aquel país.
En julio del año pasado, cerca de 130 cuentas de Twitter se vieron afectadas por el mayor incidente de seguridad de la historia de la plataforma. En el ataque, los piratas se apoderaron de perfiles verificados de personalidades como el cofundador de Microsoft Bill Gates, el expresidente estadounidense Barack Obama y el actual Joe Biden, y el CEO de Tesla Elon Musk, entre otros. También comprometieron cuentas de empresas como Apple y Uber. Tomando provecho de la visibilidad de esos s, los ciberdelincuentes intentaron concretar una estafa con criptomonedas.
Según los reportes, los atacantes recaudaron más de 100.000 dólares en bitcoins a través de esa estafa que se apoyó en una técnica conocida como suplantación de identidad, en este caso “usando” a figuras de altísimo perfil y con gran cantidad de seguidores en Twitter.
Los detenidos por el hackeo a Twitter
Tras aquellos hechos, los investigadores no tardaron mucho en arrestar al supuesto autor intelectual, el pirata informático adolescente Graham Ivan Clark (tenía 17 años al momento del hackeo), quien luego se declaró culpable de 30 cargos. Tal como contamos en TN Tecno, el joven fue condenado a tres años en prisión.
Con la sentencia confirmada, Graham Clark cumplirá parte de la condena en un campo de entrenamiento militar, donde tendrá prohibido el uso de computadoras y dispositivos electrónicos sin supervisión; además deberá ceder las contraseñas de las cuentas que controla.
“Graham Clark debe rendir cuentas por ese delito, y otros estafadores potenciales deben ver las consecuencias”, dijo en un comunicado el fiscal estatal de Hillsborough, Andrew Warren. “En este caso, hemos podido cumplir esas consecuencias reconociendo que nuestro objetivo con cualquier niño, siempre que sea posible, es que aprendan la lección sin destruir su futuro”, agregó.
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Nima Fazeli, estadounidense de 22 años, y el británico John Sheppard, de 19, colaboraron con Clark, según las investigaciones. El líder del grupo había sido arrestado en Florida, Estados Unidos, donde reside.
